Caracterización socioeconómica y modos de identidad cultural en el Consejo Comunitario Río Napi, costa pacífica caucana
Socioeconomic characterization and modes of cultural identity in the Río Napi Community Council, Pacific Coast Caucana
Wendy Tatiana Vallejo Caicedo*
* Contratista del Instituto de Investigaciones
Ambientales del Pacífico (IIAP). Investigadora del Componente
Sociocultural. e-mail: wtmarimba@gmail.com
Recepción: Septiembre 5, 2017 Aprobación: Noviembre 30, 2017 Editor Asociado: Ayala HJ. DOI: https://doi.org/10.51641/bioetnia.v15i1.203
Resumen
Las comunidades presentes en el
Consejo Comunitario Río Napi han desarrollo a lo largo del
tiempo una serie de prácticas culturales y productivas a partir
del aprovechamiento de los diversos recursos que hacen parte del
territorio colectivo, permitiéndoles garantizar la
sostenibilidad de sus familias a la vez que fortalecen las expresiones
identitarias. Estas prácticas han trascendido de
generación en generación para la pervivencia de los
saberes enmarcados en la agricultura, la minería, pesca y la
explotación forestal que permiten dinamizar la economía
de los grupos poblacionales. Los modos de identidad cultural, vistos
desde las fiestas patronales, formas de celebración, las
prácticas mortuorias y la medicina tradicional se constituyen
como elementos representativos de las comunidades negras que de manera
directa se han visto afectados o permeados por elementos globalizados o
hechos como el conflicto armado. Se realizaron entrevistas
semiestructuradas de manera aleatoria y conversatorios con los
individuos pertenecientes a las comunidades que integran el Consejo
Comunitario Río Napi. Este proceso implicó la
participación activa en la fiesta patronal celebrada en la
comunidad de Soledad, evidenciada a partir del registro
fotográfico que captura las prácticas, creencia y
costumbres de las comunidades negras.
Palabras clave: Costumbres, Identidad, Prácticas culturales, Prácticas socioeconómicas.
Abstract
The communities present in the
Río Napi Community Council have developed over time a series of
cultural and productive practices based on the use of the various
resources that are part of the collective territory, allowing them to
guarantee the sustainability of their families while strengthening
identity expressions. These
practices have transcended from generation to generation for the
survival of knowledge framed in agriculture, mining, fishing, and
forestry that allow to boost the economy of population groups.
Likewise, the modes of cultural identity, seen from the patron saint
festivities, forms of celebration, mortuary practices and traditional
medicine are constituted as representative elements of the black
communities that have been directly affected or permeated by globalized
elements or facts like armed conflict. Similarly, random
semi-structured interviews and conversations were conducted with
individuals belonging to the communities that make up the Río
Napi Community Council. Similarly, this process involved active
participation in the patron saint’s party held in the community
of Soledad, evidenced from the photographic record that captures the
practices, beliefs, and customs of black communities.
Keywords: Cultural practices, Customs, Identity, Socioeconomics practices.
Introducción
Las comunidades negras presentes en
los territorios de la costa pacífica caucana, han afirmado, de
generación en generación, prácticas
socioeconómicas y socioculturales contenida de saberes,
conocimiento tradicional y significados que dan muestra de formas
particular de representar y determinar los estilos de vida de la
población.
En ese orden de ideas, el
desarrollo de las prácticas productivas ha permitido que las
comunidades que integran el Consejo Comunitario, puedan, mediante el
cultivo del pancoger y diversas prácticas asociadas con los
ecosistemas del territorio, garantizar la sostenibilidad de las
familias:
...las comunidades de la cuenca del
río Napi tenían prácticas tradicionales de
producción, que se traducen principalmente en la agricultura,
pesca, caza, minería y extracción forestal, lo que les ha
permitido conformar una economía de subsistencia, destinada
principalmente a suplir las necesidades básicas de
alimentación de cada una de las familias. MinInterior, DACN,
GAPV 2017, p. 30.
Por otra parte, frente a la medicina
tradicional se manifiesta que, “Es la suma total de los
conocimientos, capacidades y prácticas basados en las
teorías, creencias y experiencias propias de diferentes
culturas, bien sean explicables o no, utilizadas para mantener la salud
y prevenir, diagnosticar, mejorar o tratar enfermedades físicas
y mentales” (OMS 2013, p. 15).
De igual manera, en el mismo proceso de compresión de la medicina tradicional, la OPS expone que es:
...el conjunto de todos los
conocimientos teóricos y prácticos, explicables o no,
utilizados para diagnóstico, prevención y
supresión de trastornos físicos, mentales o sociales,
basados exclusivamente en la experiencia y la observación y
transmitidos verbalmente o por escrito de una generación a otra.
Puede considerarse también como una firme amalgama de la
práctica médica activa y la experiencia ancestral. Citado
por Castillo y Vente 2016, p.10.
Por lo tanto, la práctica
curativa tiene sus bases en complejo entramado de saberes,
percepciones, símbolos creados culturalmente y donde la causa de
la enfermedad es interpretada desde idea mítica que se escapan
de los planteamientos de la medicina occidental.
En la misma secuencia, Bedoya
et al. (2012) al profundizar sobre el saber medico tradicional,
cosmovisión y creencia de los guapireños, en torno al
tema de ojo y espanto como una práctica cultural propia de un
determinado grupo social, reafirmar que el conocimiento tradicional se
fundamente desde un entramado de creencias que posibilitan la
sanación y el bienestar de la persona.
Ahora bien, en relación
con las actividades culturales se resalta el carácter de
religiosidad y catolicismo en las comunidades negras, que se expresa a
través de las fiestas patronales, las cuales son la suma de
costumbres y saberes articulados con la espiritualidad. Por ello,
Corona y Pérez (2002) manifiestan que las fiestas patronales
contribuyen de manera directa en la estructura social en la misma
medida que disminuye el detrimento de la identidad del cúmulo de
saberes tradicionales, la fractura de las relaciones familiares y
comunitarias, porque la articulación e integración de la
festividad permite establecer, reforzar, consolidar y reparar los lazos
entre ellos.
Así también, la
representación del folclor cumple un papel importante dentro del
desarrollo de las festividades o fiestas patronales porque a partir de
su desarrollo se efectúan danzas, actividades culturales que
implica el uso de instrumentos musicales tradicionales como la marimba,
el bombo, el cununo y el guasá. Por tanto, desde los
planteamientos de las Organizaciones y Consejos Comunitarios del Sur
del Pacífico et al. (2015) estas celebraciones contribuyen a la
conservación y salvaguarda de los repertorios de danzas
tradicionales que distinguen la cultura popular tradicional en la parte
urbana y la rural para perpetuar proceso de diferenciación entre
grupos sociales.
Finalmente, “El Consejo
Comunitario del Río Napi ostenta gran variedad de
prácticas culturales como los chigualos, los arrullos, los
alabaos y la última noche” (MinInterior, DACN, GAPV 2017,
p. 16). En ese sentido, las prácticas mortuorias también
se expresan como un elemento invaluable de las comunidades negras
debido a su representación y significado, hacen posible que
despedir a los muertos se convierta en un acto identitario.
Metodología
Área de estudio. En el marco del establecimiento de las comunidades del área a investigar, se establecen los siguientes datos:
La solicitud de titulación se
realizó por aquel entonces por el representante legal Humberto
Villa el 25 de noviembre de 1997, sobre un globo de terreno
baldío denominado Río Napi […] con una
extensión aproximada de sesenta mil (60.000) Hectáreas,
para beneficiar 2.074 personas, distribuidas 438 familias. MinInterior,
DACN, GAPV 2017, p. 21.
Esta constitución legal del
consejo comunitario, permite evidenciar las diversas comunidades que
mediante unas dinámicas fueron moldeando, adaptando e
impregnando de saberes y conocimiento tradicional el territorio
colectivo:
...el complejo conocimiento sobre el
río de los pobladores ha sido la base para la
configuración del territorio compuesto por 10 comunidades.
Subiendo el cauce del río se encuentran Isla de Tomás,
Playa del Medio, Sangaral, San Antonio de Napi, Santa Gertrudis,
Chuarez, Calle Larga, San Agustín y Belén de Napi.
MinInterior, DACN, GAPV 2017, p. 20.
Siguiendo la línea frente a
los aspectos socioeconómicos, es de relevancia traer a
colación que las comunidades se caracterizan por el desarrollo
de diversas prácticas productivas que permite garantizar una
sostenibilidad en el tiempo del territorio mediante expresiones
identitarias que dan muestra de las relaciones de solidaridad,
intercambio y trabajo mancomunado; por tanto, “las alianzas
productivas como la minga, la mano cambiada y los grupos de trabajos
familiares que se ejercen en todas las actividades económicas y
sociales que realiza la comunidad, permite un uso apropiado,
persistente y sostenible de los recursos naturales renovables y no
renovables del territorio (MinInterior, DACN, GAPV 2017, p. 30).
Método.
Se empleó un enfoque cualitativo en el proceso de caracterizar
las dinámicas socioeconómicas y los modos de identidad
cultural en el Consejo Comunitario Río Napi (CCRN). Para la
recolección de la información se establecieron como
técnica la entrevista semiestructurada y conversatorios
centrados en los siguientes componentes: dinámicas
socioculturales y socioeconómicas, las prácticas como
forma de expresión cultural y afirmación de la identidad.
Referente a la
población escogida, se tuvieron en cuenta adultos y
jóvenes, mujeres y hombres con conocimientos sobre medicina
tradicional, líderes activos en los procesos culturales y
rezanderos.
Se considera necesario exponer que
los aspectos metodológicos que enmarcan la investigación,
no se reducen a la técnica empleada para acceder a la
información primaria que permite corroborar o diferir de los
objetivos planteados, por el contrario, constituyen un mecanismo de
acercamiento y reconocimiento de la propia cultural o cultura que es
recreada a través de diferentes escenarios donde un grupo
social, interacciona e intercambia saberes.
Resultados y discusión
Prácticas socioeconómicas. Después
de un proceso de interacción con las comunidades negras, se
puede evidenciar que las prácticas socioeconómicas en el
CCRN son producto de las actividades realizadas ancestralmente, donde
la relación con el territorio constituye más que una
simple delimitación del lugar, porque a través de esta
las comunidades pueden recrear una serie de prácticas basadas en
la agricultura, la pesca, la minería y la explotación
forestal, actividades pecuarias y la cacería. Por lo tanto, las
prácticas productivas se constituyen como la base
económica esencial a nivel urbano y rural.
Pesca.
La pesca permite a las comunidades establecer una dieta alimentaria
basada en los productos que las fuentes hídricas le pueden
proporcionar. De igual forma, esta actividad ancestralmente se ha
caracterizado por ser realizada por los hombres a través de
mecanismos como la barrida, cerco o taponamiento. La práctica
pesquera muestra o presenta debilidades en el proceso de
tecnificación o uso de herramientas y utensilios modernizados;
no obstante, mediante el conocimiento empírico, la
intersección con las fases de la luna y la capacidad de
adaptación a las condiciones del medio, en relación con
las particularidades y diferencias que presentan las fuentes
hídricas, se han consolidado experiencias positivas que permiten
el aprovechamiento de los recursos y el uso racional frente al mismo.
De igual modo, las mujeres juegan un papel muy importante en el proceso
de limpieza del pescado, porque son ellas las que se encargan de
arreglarlo, tanto para el consumo, como para la venta, cuando los
hombres regresan de esta faena.
Cacería.
Es realizada exclusivamente por los hombres que al internarse en la
selva capturan animales como el venado, el conejo, guatín,
armadillo, zorra, tatabro, zaino y oso, que contribuye a la dieta
alimentaria de sus familias, las perteneciente a los consejos
comunitarios aledaños y la población urbana.
Agricultura.
Las comunidades conservan las prácticas tradicionales que
implica sembrar productos de pancoger: la papachina, el plátano,
el chivo, la yuca y árboles frutales como árbol del pan,
aguacate, caimito, bacao, entre otros productos que hacen parte de la
dieta alimentaria de las familias.
Minería.
La extracción de oro, es unas de las actividades más
desarrolladas en el territorio colectivo. Dentro de las formas de
extracción, se encuentra la artesanal o de barequeo que no causa
mayor impacto ambiental, donde la batea es la herramienta empleada. De
igual forma, la minería a mayor escala implica la presencia de
maquinaria, monitores, retroexcavadora que han transformado el curso de
los ríos y por ende, las dinámicas de transporte y
movilidad en el mismo. Por consiguiente, el empleo de herramientas
tecnificadas ha generado el deterioro del medio ambiente, las fuentes
hídricas, la flora y la fauna.
Actividad forestal.
La extracción de madera es realizada para la elaboración
de herramientas que facilitan la movilidad en el territorio y diversos
utensilios para la vivienda, siendo así que de esta se obtiene
el material para la fabricación de diferentes productos como
potrillos, canaletes, la construcción de viviendas, sillas,
utensilios para el hogar como bateas, molinillo, entre otras.
Ancestralmente esta actividad era realizada con hacha; sin embargo,
debido a la inclusión de nuevas herramientas tecnificadas, se
práctica con motosierra para la reducción de tiempo y
fuerza de trabajo.
Actividad pecuaria.
Las comunidades del CCRN se dedican a la cría de vacas, gallinas
ponedoras y pollos de engorde, que son alimentados con los mismos
productos cultivados por las familias y materia orgánica como:
residuos del coco, pelusa del arroz, las hiervas de azotea, maíz
y frutos en estado de descomposición, etc. Estas actividades son
realizadas solo para la subsistencia de las familias.
Modos de identidad cultural
Fiestas patronales.
En el marco de las festividades los pueblos manifiestan un verdadero
fervor hacia diferentes santos en los cuales edifican su fe. Por ello,
se puede visibilizar la celebración de los santos como es el
caso de San Pedro (Figura 1) en la comunidad de Soledad, la semana
santa en Calle Larga y la celebración de su patrón el
señor de las Buenas Esperanzas a quien se le asignan diversos
milagros.
Figura 1. a y b. Decoración y arreglo de la iglesia. c. Celebración de santa misa, fiesta patronal de San Pedro
Para la celebración,
hay un grupo de cuatro hombres denominados alfares de San Pedro,
quienes son los que se encargan de organizar y vestir al santo (Figura
1), limpiar la iglesia, encenderle las velas, entre otras actividades
relacionadas con la festividad.
En la misma secuencia, como se
evidencia en la Figura 1, la celebración va surgiendo entorno a
los músicos que tocan la chirimía, quienes el día
29 de junio en la madrugada recorren las calles entonando diferentes
melodías que invitan a unirse y festejar. Luego suenan las
campanas de la iglesia que invitan a la comunidad a participar de la
celebración solemne. Al culminar la misa San Pedro es tomado en
hombros y paseado por la comunidad, acompañado del grupo de
chirimía, el cura, los alfares y la comunidad en general que van
entonando alabados y rezos para ensalzar a su santo (Figura 2).
Figura 2. Grupo de chirimía, fiesta patronal de San Pedro, comunidad de Soledad
Esta festividad se encuentra
permeada por las prácticas folclóricas representa desde
los grupos de danzas compuestos por niños que evocan a
través del baile las raíces africanas que están
impregnadas en el toque de marimba, cununo y guasa. El aprendizaje de
aas danzas que es inculcado a temprana edad, es producto de la herencia
mezclada con elementos de los ritmos coloniales permiten afianzar la
identidad de las comunidades (Figura 3).
Figura 3. Representación cultural en la fiesta patronal de San Pedro, comunidad de Soledad
Finalmente, la
celebración de la fiesta patronal se constituye como una
expresión identitaria que da muestra de los elementos religiosos
y espirituales que convergen para afianzar las creencias y perpetuar el
entramado simbólico. En ese sentido, no solo se trata de bailar
y festejar al santo el día designado, sino de volverlo parte de
su vida, de sus pensamientos y acciones, porque solo a través de
estas se fundamenta la verdadera devoción y amor hacia el mismo.
Ritos fúnebres.
La muerte implica la unificación de las familias y de la
comunidad en general. Debido a la cohesión social, las personas
se congregan en torno a los dolientes ayudando en la preparación
del rito mortuorio. Se comunican unos a otros sobre este acontecimiento
para que todos puedan unirse y despedir al amigo, familiar, vecino,
compañero que ha dejado el mundo terrenal “El proceso de
la muerte no consiste solo en el deceso; involucra también la
preparación, arreglo y conservación del cuerpo hasta
cuando los deudos lo ponen en su ataúd, para que la comunidad lo
vele, le rece, le cante y/o le baile” (Arocha 2008, p. 33). Dicho
acto simbólico, se encuentra cargado de significados, de
historia, fundado desde las cosmovisiones e imaginarios que hacen de la
muerte una parte de la cultura por su carácter diferenciado e
identitario.
El arreglo del cadáver.
El difunto es arreglado y embalsado, luego se viste con un traje
adecuado para la ocasión (en muchos casos los difuntos en vida
dejan el traje comprado para cuando mueran). La mujer juega un papel
muy importante, porque ella es la que se encarga de preparar la tumba
con sábanas blancas en una esquina de la casa y colocando una
mariposa negra en la mitad. Al estar lista la tumba se coloca el
ataúd en una mesa o un soporte de madera u otro material y se
finaliza poniendo cuatro velas en platillos, dos de cada costado.
El velatorio del cadáver.
El velorio es realizado el mismo día en que la persona fallece e
implica acompañar desde las siete de la noche hasta el amanecer.
Se reza, entonan alabaos, se reparte bebidas alcohólicas y los
acompañantes juegan dominó o cartas como forma de
entretenimiento.
El proceso de entierro.
El día del entierro las personas llegan primero a la casa donde
se encuentra el muerto y de ahí se dirigen lentamente entonando
cánticos y rezando hasta llegar a la iglesia donde se lleva a
cabo la misa; en el caso de la zona rural si no se encuentra el cura,
el mayordomo que es la persona encargada de la iglesia, realiza un rezo
y rocía agua bendita en el ataúd. Posteriormente,
terminada la misa se lleva al difunto a los lugares donde tuvo
incidencia, p.e., el lugar de trabajo y de ahí es llevado por la
calle principal hacia el cementerio.
Chigualo.
Es realizado en caso de que un niño haya fallecido; como es un
angelito el que le tocó partir, los significados entre el
chigualo y la muerte de un adulto son diferentes, porque el niño
es un alma sin pecado. En este se realizan rondas, juegos infantiles y
se entonan cánticos que permitan una partida alegre al encuentro
con el Señor.
Los padrinos de agua de
socorro hacen las veces de dinamizadores de las danzas (currulao,
bunde), toman el cadáver y luego se pasa de mano en mano entre
aquellos que participan del chigualo y al recibirlo, se le canta o
recitan coplas.
Última noche. Tiene
mucha importancia y es el que más aglomera personas, porque con
este finaliza la novena, se decora la tumba con flores y las mejores
telas, se rezan tres rosarios, a las 12 de la noche se reparten pan,
café y durante toda la noche se proporciona bebidas y
aromáticas a los acompañantes. Alrededor de la once de la
noche inician los juegos de dominó, naipe, parqués, entre
otros.
Se debe rescatar que al ser un
muerto de la comunidad y no solo de los dolientes, los arreglos,
bebidas y alimentos son proporcionados en su gran mayoría por
otras personas diferente a las familiares, cada quien aporta de acuerdo
con sus condiciones económicas, porque esto significa
solidarizarse con los dueños del muerto y demostrar eterna
gratitud en el caso de los amigos del fallecido.
El cabo de año. Este
es celebrado al año de fallecida la persona, que implica
realizar misas tanto en la mañana como en la noche. En esta
etapa las personas al culminar la celebración que inicia a las
siete de la mañana van en procesión hacia el cementerio
llevando arreglos florales que son cargados por los niños,
luego, en la tumba rezan, entonan alabaos y serenatas.
Medicina tradicional
Partero (a).
Es frecuente encontrar que las mujeres tradicionalmente recurran a la
partera o partero para que atienda el nacimiento de los niños,
pese a que en muchos casos llevan un control o un seguimiento
respectivo. Los parteros son personas que han adquirido su conocimiento
de los padres, familiares o los sabedores de las comunidades.
De igual manera, son valorados
en las comunidades por el aporte cultural que hacen desde la salud a
las comunidades. Se crean lazos o vínculos de familiaridad con
la madre y el hijo por los servicios prestados y en muchos casos
trascienden al compadrazgo porque son elegidos como padrinos de los
niños, quienes deben su respeto y gratitud hacia este.
Curandero (a).
En las comunidades se recurre al curandero para tratar diferentes
enfermedades; el reuma, soplo en el corazón,
hipertensión, entre otras. No obstante, se acude a este
principalmente para pócimas o baños que permitan mejorar
la suerte, alejar los malos pasamientos, curar la picadura de
serpientes, como la X, la verrugosa, la veinticuatro, curar el pasmo en
las mujeres, etc. Las mujeres acuden a los curanderos cuando presentan
problemas de fertilidad porque este agiliza el proceso del embarazo
mediante bebidas o botellas curadas realizadas con plantas medicinales.
En relación con lo
mencionado, se establecen conceptos como el curanderismo, que hace
referencia a una práctica curativa que tiene sus bases en
complejo entramado de saberes, percepciones, símbolos creados
culturalmente y donde la causa de la enfermedad es interpretada desde
idea mítica que no son entendidos desde la medicina occidental.
Sobandero (a).
Los sobanderos (a) mediante el uso de ungüentos, mezclados con
plantas medicinales, atienden los problemas de articulaciones y en el
caso de que la persona se disloque o presente alguna lesión en
los huesos, ponen sus conocimientos al servicio de la comunidad.
También utilizan pociones y botellas curadas para los sobijos.
Bajo lo expuesto se reflexiona
que, los modos de identidad señalados son producto de las
prácticas y saberes heredados a través del tiempo y se
constituyen como la base identitaria de las comunidades. Siendo
así, el territorio está marcada por un cúmulo de
saberes tradiciones que tranzan por la música, la
sanación, los aspectos religiosos y espirituales que permite
seguir reafirmando o construyendo nuevos repertorios culturales.
Por consiguiente, queda claro
que estas expresiones dan muestra de los elementos sincréticos
que contribuyen a la estabilidad de dinámicas sociales y
culturales como garantes de formas o estilos de vida de los individuos.
Por tanto, refiriendo el hecho de la muerte es necesario traer a
colación que:
De los diversos ámbitos de la
condición humana, lo religioso, lo espiritual, lo
cosmogónico y lo sagrado son asuntos trascendentales y vitales.
Se trata del mundo simbólico, estructural de los seres humanos
en el que se evidencia una permanente reflexión sobre los
distintos momentos entre la vida y de la muerte al interior de cada
cultura. Delgado 2008, p. 143.
Donde en el caso de las comunidades
negras, la muerte como un hecho de cohesión social, afianza y
reafirma una estructura identitaria, en la medida en que como acto que
transversaliza a todos los grupos sociales, es representado desde unas
particularidades que atañen a todo un acerco cultura heredado y
de diferenciación con los otros.
Figura 4. a. Entrevistas a rezandero. b. Partero. c. Curandero.
Conclusiones
Las comunidades que integran el CCRN
están forjadas por las diversas prácticas tanto
socioculturales como socioeconómicas que prevalecen en el
territorio. Los imaginarios y cosmovisiones siguen presente en la
construcción de los pueblos como elementos determinantes para
diferenciarlos y aportar culturalmente a nivel comunitario y local.
Por tanto, las prácticas
productivas, religiosas, mortuorias y medicinales reflejan mediante
cada representación que las comunidades negras impregnan de
contenidos culturales y consolidan los territorios de saberes para
seguir representado el legado africano y tejer bajo las nuevas
dinámicas sociales, económicas y ambientales nuevos
repertorios que evidencien el conocimiento tradicional como el pilar en
torno al cual construyen modos de vida.
Literatura citada
- Arocha J. 2008. Muerte.
Velorios y santos vivos. Comunidades negras, afrocolombianas, raizales
y palenqueras. Bogotá: Museo Nacional de Colombia. pp. 33-7.
Disponible en: https://bit.ly/33Vwfvi
- Bedoya M. Del Cairo, Tabares
CE, Delgado M. 2012. Entre la tradición y el cambio. El ojo y el
espanto como percepción cultural de enfermedad en niños
del municipio de Guapi, Cauca, Colombia. En: Voces, perspectiva y
miradas del Pacífico. pp. 225-42. Popayán: Editorial
Universidad del Cauca. Disponible en: https://bit.ly/3Ge6EuQ
- Castillo G, Vente Y. 2016.
Desarrollo de las prácticas curativas mágico-religiosas
en Zacarías, Dagua. Anteproyecto. Universidad del
Pacífico.
- Corona Y, Pérez C. 2002.
Resistencia e identidad como estrategias para la reproducción
cultural. Anuario de Investigación. 2: 55-66.
Disponible en: https://bit.ly/3G5Ns2g
- Delgado R. 2008. Investigar lo
sagrado. En: Arocha J. 2008. Velorios y santos vivos. comunidades
negras, afrocolombianas, raizales y palenqueras. Bogotá: Museo
Nacional de Colombia. pp. 143-5. Disponible en: https://bit.ly/33Vwfvi
- Ministerio del Interior, DACN y
GAPV. 2017. Plan de caracterización del Consejo Comunitario de
Río Napi, Guapi. Bogotá: Ministerio del Interior, DACN y
GAPV. 64 pp. Disponible en: https://bit.ly/3L1qCfZ
- OMS. 2013. Estrategia de la OMS sobre medicina tradicional 2014-2023. 72 pp. Disponible en: https://bit.ly/3o4qF0w
- Organizaciones y Consejos
Comunitarios del Sur del Pacífico, MinMinas, IIAP 2015.
Guía de relacionamiento de las comunidades negras de los
departamentos del Valle, Cauca y Nariño y el sector minero
energético. Disponible en: https://bit.ly/3u6CrLK